Los hombres antiguos no hablaban inglés

En el mundo antiguo, las parvadas de mujeres ave sobrevolaban las aldeas cercanas a los bosques, dejaban  a su paso un rastro de plumas arco iris y un canto dulce que alegraba la jornada. Los hombres antiguos miraban al cielo y saludaban  agradecidos. —Dead men, dead men— el eco de los cantos hacía temblar al bosque.